Historia de la raza Dóberman
Friedrich L. Dobermann (1834-1892) necesitaba un perro fiero, fiel y dócil para protegerse de los posibles atracos que podía sufrir debido a que era habitual que llevase grandes cantidades de dinero relacionadas con su profesión.
Es así que mediante el cruce de diferentes razas llegó a conseguir el animal que él necesitaba. Aunque la raza no fue reconocida hasta 1895, después de su muerte. Quién siguió con su labor fue Otto Göller.
Como antes mencionamos, las funciones para la que fue creada la raza era la de protección y la de acompañar al hombre. Para ello tenía que poseer un olfato y un oído capaz de detectar cualquier indicio de peligro, como humo o movimientos en forma lejana. Debería tener la habilidad de poder rastrear, para encontrar personas u objetos perdidos. Por otro lado, tenía que ser lo suficientemente grande como para imponer respeto, sin por ello dejar de poder acomodarse a lugares restringidos. Su pelaje debería ser corto, con el objeto de dedicarle el mínimo de cuidado. Pero, por sobre todas las cosas, debería tener la capacidad de defender a su amo.
No hay registros documentados de las razas que se utilizaron en la creación del Dobermann. Pero se tiene una idea de que los que tuvieron gran intervención son el Pínscher Alemán (terrier), un Viejo Pastor Alemán (razas hoy extinguidas), el Rottwéiler y el Weimáraner.
El Rottwéiler era de capacidad robusta, poseía la habilidad de arreo, era compañero y un gran guardián. Todo ésto era muy tenido en cuenta por mercaderes y carniceros de la época. El Dobermann le debe la bravura y la capacidad de guarda a aquél. El Weimáraner le otorgó la capacidad de caza, cobro y rastreo de piezas. A el Viejo Pastor Alemán se le atribuye el contribuir con su inteligencia, fortaleza y equilibrio físico y mental. Y el Pínscher puede haberle agregado la reacción rápida. A principios de siglo se documentó una cruza realizada con un Greyhound negro y un par de cruzas con otros Térriers. Se cree que la cruza con estos le otorgaron al Dóberman la gran velocidad y rápidez de reacción.
En la creación de Dobermann fue su función y no la apariencia lo que primó. Sin embargo, su belleza ha sido un subproducto y no la meta final. Los Dóbermans primitivos se parecían al viejo Rottwéiler. Muchos tenían manchas blancas en su pecho o en las patas, y hasta algunos presentaban pelo ondulado. Con el Greyhound aparecieron las patas y cuello mas largo y otra línea abdominal. Para destacar es que salvo el Weimaraner y el Greyhound las otras razas relacionadas con el Dóberman eran negras con marcas tostadas.
Esto último es probablemente lo que haya colaborado a que el color del Dóberman se haya estabilizado en un tiempo corto, y en el hecho de que los negros siempre sobrepasaron en número a los otros tres colores aceptados.
Actualmente existen cuatro divisiones de color, todas con las marcas características, cuyo color ideal tiene que ser rojo herrumbre, variando su tono desde el caoba y pasando por el rojo vino, tostado, amarillo o inclusive el color paja.
Para entender la división de colores deberíamos tener en cuenta el negro, marrón, gris y el beige. En el estándar están enumerados de manera más profunda y confusa, pero básicamente podemos agregar que cuando se menciona el rojo es realmente marrón rojizo, el azul es gris plomizo y el cervato (bayo) es beige plateado. El único color que no se presta a confusión es el negro.
Para entender la división de colores deberíamos tener en cuenta el negro, marrón, gris y el beige. En el estándar están enumerados de manera más profunda y confusa, pero básicamente podemos agregar que cuando se menciona el rojo es realmente marrón rojizo, el azul es gris plomizo y el cervato (bayo) es beige plateado. El único color que no se presta a confusión es el negro.
Descripción de la raza Dóberman
Aspecto General. Es un perro de talla media, de cuerpo firme, elegante y musculoso. Su temperamento es atrevido, alerta y de porte airoso. Gracias a su constitución es un perro veloz, de paso ligero y elástico, sus ojos denotan firmeza de carácter e inteligencia. Es fiel y obediente. Los jueces deben penalizar severamente la timidez o cualquier imperfección.
Carácter: Macho y hembra tienen temperamento distinto. La hembra es tranquila, sensible, afectuosa en familia, desconfiada con extraños. El macho, en cambio, es impetuoso, muy inteligente, frecuentemente agresivo y debe ser dominado por la mano enérgica de un amo. No existen malos Dóberman, pero sí malos amos. La personalidad del Dóberman se desarrolla después de los dos años de edad, pero su adiestramiento severo debe iniciarse cuando cumple los 10-12 meses. Es un perro más bien longevo: puede llegar a los 15 y también a los 20 años.
Cabeza y Cráneo. Larga en proporción al cuerpo, bien llena bajo los ojos, de líneas definidas. Vista desde arriba o desde el costado se asemeja a una cuña truncada. La cabeza en su parte superior debe ser lo más gruesa posible y sin arrugas. El cráneo debe ser plano con stop poco pronunciado y la línea del hocico paralela a la línea superior del cráneo. Sus mejillas planas y de labios apretados. La nariz negra, castaño muy oscuro en los perros castaños y gris oscuro en los azules.
Ojos. Ojos oscuros con expresión de gran inteligencia.
Orejas. Orejas amputadas de porte derecho (puede competir también con las orejas sin cortar).
Pelo. Pelo corto, denso, duro y adherente.
Movimiento. El Dóberman debe tener un andar elástico y elegante, cubriendo mucho terreno.
Cola. Se amputa en la primera o segunda articulación para que parezca continuación de la espina dorsal, sin caída material.
Extremidades Anteriores. Los pies delanteros bien arqueados sin volverse hacia afuera o hacia adentro, compactos y tipo gato. Se deben quitar todos los espolones. Son penalizadas las cañas débiles, los pies planos y desviados
Extremidades Posteriores. Los pies traseros también deben ser bien arqueados, compactos y tipo gato, sin volverse hacia afuera o hacia adentro.
Color. Son permitidos los colores negro, castaño o azul, con marcas rojo óxido bien definidas y delimitadas, que aparecen encima de los ojos, el hocico, la garganta, el antepecho, en las patas y pies y debajo de la cola. No se aceptan por ningún motivo las manchas blancas.
Talla. Para los machos la altura de la cruz varía entre los 62 y los 68 cm; para las hembras entre 58 y 65 cm.