Los animales domésticos, especialmente el perro, son muy curiosos y con frecuencia son víctimas de su comportamiento. En sus incursiones olfatean todo y hay ciertas especies animales que poseen propiedades tóxicas, tales como insectos, serpientes, ranas, y procesionaria, entre otros.
¿Cómo ocurren los envenenamientos de perros con la procesionaria?
El drama se desencadena así. El perro huele y patea a las orugas.Inmediatamente, siente un gran picor y dolor. Como lame sus patas, los pelos de las orugas acaban en sus lengua y en la boca. Se produce un terrible dolor y picor, shock alérgico, descenso de la presión, hinchazón extrema de la lengua, del sistema respiratorio y el digestivo, problemas para respirar, sensación de ahogo, comportamiento apático, saliva y espuma blanca en la boca, reacción asmática, coma, insuficiencia renal, muerte . La mayoría de los perros pequeños mueren por contacto con la oruga venenosa, algunos incluso en menos de 1 hora. Debido a la necrosis, muchos perros que sobreviven pierden parte de la lengua o de la cara.
Dos casos de perros envenenados por procesionaria
Animal que comenzó a vomitar bilis y sangre después de un paseo por el bosque. Los propietarios señalaron que parecía tener algo en la boca y cuando trataron de retirarlo vieron que la lengua del animal tenía un color violeta. El propietario,después de hurgar en la boca del animal, comenzó a sentir una sensación de ardor en las manos, que luego dio una erupción cutánea leve. Al llegar a la clínica comienza a tener convulsiones, entrando en shock anafiláctico.
La prioridad era detener la convulsión. Se realizó cateterización venosa y administración diazepam a una dosis de 0,5mg / kg IV. El animal fue sedado con diazepam durante los primeros cinco días, recibiendo tratamiento frente al shock y el cuadro digestivo.El animal perdió parte la nariz, labio superior y lengua, por lo que tuvo que aprender a comer de nuevo, con estas limitaciones.
Fue por la tarde, un día de tormenta. Mi esposa y yo estábamos recogiendo piñas en un bosque de pinos. Nos acompañaban nuestros dos perros. Ya habíamos estado allí tres veces, semanas antes y no habíamos visto ninguna oruga. Encontramos un nido de procesionaria del pino en el suelo. Había oído que son peligrosos para los perros, así que nos fuimos inmediatamente. Llamamos a nuestros perros, pero uno no apareció hasta pasados 5 minutos. Caminaba inusualmente lento, con la cola hacia abajo; estaba apático y tenía espuma blanca en su boca. Después de llegar a casa y tratar de lavar la boca del perro, fuimos al veterinario. El veterinario inmediatamente le lavó la boca con agua y le puso una vía para infundirle un agente antihistamínico (cortisona). Nuestro perro murió a la mañana siguiente.
¿Qué es la procesionaria?
La procesionaria del pino, también llamada oruga del pino,Thaumetopoea pityocampa, pertenece al orden lepidópteros, familia Thaumatopoidea género Thaumetopoea . Esta especie, conocida desde la antigüedad, es la plaga más destructiva de pino.
Thaumetopoea pityocampa es una especie que se distribuye por la Península Ibérica, Turquía y el norte de África.
El ciclo de vida de la procesionaria del pino incluye dos fases que tienen lugar en los diferentes estratos del ecosistema forestal. La fase de aire en la copa del árbol anfitrión, que incluye la postura y el desarrollo de las larvas y la fase subterránea del pre-pupa, pupa y desarrollo del adulto.
La transición de una fase a la otra se produce de febrero a mayo con la migración colectiva de orugas, que dejan el árbol anfitrión en procesión para enterrarse en el suelo unos pocos centímetros de profundidad. En junio se inicia la fase aérea que se extiende hasta Agosto con la emergencia de los adultos y el posterior acoplamiento. Después, las hembras, buscan el lugar más apropiado para la puesta. A mediados de septiembre, y una vez que se completa el desarrollo embrionario, las orugas nacen.
En la primera etapa de desarrollo, las orugas sufren los primeros cambios. En esta etapa, las orugas tienen el pelo blanco en los lados y una zona naranja en la región dorsal, destacando ya en ella pequeños puntos negros en cada segmento, que corresponden los envases de los futuros pelos urticantes. La duración de esta etapa es de aproximadamente quince a veinte días.
En la segunda etapa, las orugas tejen nidos donde se agrupan gran número de individuos en varias posiciones. La estructura de estos nidos permite la acumulación de calor necesario para la supervivencia las colonias durante el invierno. Las orugas abandonan el nido desde el atardecer para alimentarse durante la noche, pero se quedan pegadas por un hilo de seda que les permite regresar.
En los dos últimos estadios de desarrollo, se termina de formar la unidad defensiva de las orugas, y se compone de ocho zonas situadas entre el primer y octavo segmento abdominal, cada uno integrado por aproximadamente 120.000 pelos urticantes de color naranja. Los pelos contienen una proteína, la taumatopoína, que es capaz de desencadenar la liberación en la piel y mucosas de histamina y acetilcolina.
La intoxicación por contacto con esta especie lleva
una base estacional, dependiendo del clima de la región, con un mayor porcentaje de casos durante la primavera y el verano. Las especies animales que pueden verse afectadas son los zorros, las jinetas y tejones, caballos, ovejas, aves de corral, cerdos, perros y el gato.
En el perro, la parte del cuerpo más afectada
es la cabeza, especialmente los labios, la mucosa oral y la lengua.
¿Cuáles son los síntomas de los envenenamientos de perros con la procesionaria?
La intoxicación se produce tras un paseo por los bosques de pinos,con aparición súbita y violenta de los signos clínicos.
Los síntomas se pueden clasificar en locales y
sistémico. En los síntomas locales, la lengua es el órgano
más afectados: se hincha, se pone azulada
y pueden aparecer zonas de necrosis y pérdida del tejido en un período de 6 a 10 días. Al perro literalmente, se le cae la lengua. Además, la inflamación de la boca, se acompaña con babeo y dificultad par tragar. A veces, se observan signos oculares, como la conjuntivitis
y queratitis ulcerativa o signos cutáneos como edema
facial, urticaria e intensa erupción facial . Si se produce contacto de la procesionaria con la laringe
o mucosa nasal, aparecerá tos, dificultades
respiratoria y asfixia por edema. El dueño y el veterinario pueden presentar un intenso picor en las manos y brazos como
resultado de la manipulación del animal.
Los signos clínicos sistémicos son raros, pero
posibles.Se han dado casos de shock anafiláctico,
temblores musculares, coma e incluso la muerte del animal. A veces trastornos gastrointestinales como vómitos y diarrea.
¿Con qué se pueden confundir los envenenamientos de perros con la procesionaria?
Los diagnósticos diferenciales serán con otros envenenamiento por contacto, alimentos,
medicamentos, parásitos gastrointestinales, serpiente, picaduras de insectos y aracnídos, inhalación de alérgenos o trastornos dentales. La característica más específica de estos trastornos es la presencia de edema que afecta los labios, la nariz, los párpados y
oídos e incluso, cabeza , cuello y el tronco. En mordeduras de serpientes
y picado por insectos heminópteros, las reacciones de
hipersensibilidad son localizadas justo en el lugar de la inyección
veneno.
¿Cuál es el tratamiento?
Se recomienda tratamiento sintomático. La primera
medida terapéutica es el lavado abundante del área afectada por pulverización con suero
fisiológica con el objetivo de
quitar el pelo de la procesionaria de la piel y / o membranas mucosas. La región afectada no
debe ser frotada para evitar la rotura del pelo y
liberación de la taumatopoína.
Para combatir la hipersensibilidad aguda se deben aplicar corticosteroides (dexametasona) por vía intravenosa y antihistamínicos (prometazina) por vía subcutánea.
Los antibióticos son útiles en la prevención de infecciones
secundarias.
Se recomienda la sedación leve para combatir el dolor
y en los casos de trastornos gastrointestinales graves,
vómitos y diarrea, se recomienda la administración la metoclopramida (Primperan).
La inyección de heparina intralingual, 200 a 500 UI / kg durante ocho horas controla la necrosis de la lengua.
Los animales debilitados, con dificultad para beber y alimentarse, deben ser hospitalizados
para llevar a cabo una terapia de fluidos y normalizar la función
riñón. En circunstancias especiales puede ser necesario
alimentar al animal a través de un tubo nasogástrico. La duración del tratamiento depende del estado general del animal, los animales se recuperan normalmente
hasta en 10 días.
El pronóstico es malo, aunque la mayor parte de los casos presentan una evolución favorable. Sin embargo, depende del grado de deterioro y de cuándo se inicia el tratamiento. Los animales con signos de edema y urticaria se recuperan en un período
24 horas, sin embargo, en aquellos con estomatitis y glositis, la recuperación tarda cerca de 3 días.
A veces el perro no muere, pero las lesiones resultantes pueden deteriorar gravemente su calidad de vida, con la pérdida de lengua y labios.
¿Cómo puede prevenirse?
Evitar caminar por los bosques de pino o áreas donde hay nidos de procesionaria, especialmente entre febrero y mayo.
En la etapa larval, las procesionaria
son sensibles a los insecticidas. Es eficaz la pulverización de
triclorfón 5% o piretrinas. En las zonas endémicas para destruir la procesionaria
se recomienda utilizar diflubenzuron. Los nidos pueden
ser destruidos con inyecciones de aceite o insecticidas,
o quemar los nidos tras rociarlos con laca (para que no se expandan los pelos por el aire).
Además del contacto directo con las orugas, también el manejo de nidos de procesionaria puede ser peligroso, ya que estos
están llenos de excrementos.Los pelos que sean transportados por el viento, contaminan el
medio ambiente y al contacto con la piel o mucosas pueden dar lugar a reacciones alérgicas.